La sal marina es un ingrediente indispensable en muchos productos de belleza y pérdida de peso, estimula el metabolismo y la excreción de sustancias nocivas.
A día de hoy, se ha comprobado que la sal marina contiene alrededor de ochenta minerales diferentes, oligoelementos, carbonatos y sulfatos, y también están presentes calcio, potasio, bromo, sodio, manganeso, magnesio, yodo y hierro.
¿Qué problemas alivia o previene la sal marina?
Entre los principales beneficios del consumo de sal marina, encontramos:
Fortalece el sistema inmunitario: el cuerpo es más resistente a la gripe, las alergias, los virus y otras enfermedades autoinmunes.
Para una piel brillante y una línea delgada : los minerales de la sal se unen a las células de la piel, por lo que se vuelve más brillante y aterciopelado, y por las mismas razones, los baños con sal marina promueven la pérdida de peso y conducen a la eliminación o reducción de la celulitis y la regeneración del tejido de la piel, por lo que tienen efecto anticelulítico y antienvejecimiento.
Alivia las enfermedades de la piel: alivia la piel seca y la picazón, pero también alivia enfermedades graves como la psoriasis y el eccema. El baño de sal marina abre los poros, mejora la circulación en la piel e hidrata el tejido.
Calma el asma: la sal marina también es efectiva para reducir la inflamación en el sistema respiratorio. Disminuye la producción de moco que facilita la respiración.
Es ideal para controlar la diabetes: la sal marina puede ayudar a reducir la necesidad de insulina, ya que es buena para mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre.
Conserva los huesos en un buen estado: si el cuerpo carece de sal y agua, comienza a “extraer” sodio de los huesos, lo que puede provocar osteoporosis. Por lo tanto, al consumir mucha agua e ingerir sal marina con moderación, puede prevenir el desarrollo de enfermedades más graves.